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Encuesta Bicentenario UC: percepción sobre migración y la urgencia de una política pública

15 de junio de 2024


El evento organizado por el Centro de Políticas Públicas, fue moderado por Mariana Fulgueiras, coordinadora de proyectos en el Laboratorio de Innovación Pública del CPP, y contó con la presencia del académico de la Escuela de Gobierno UC, Roberto Méndez, y un panel de expertos compuesto por Luis Thayer, director del Servicio Nacional de Migraciones, Patricia Roa, oficial de Programación de la OIT para el Cono Sur y Álvaro Bellolio, director de la Escuela de Gobierno UNAB.

Chilenos y Migrantes: encuentros y desencuentros

Roberto Méndez expuso sobre los principales resultados obtenidos en la última edición de la Encuesta Bicentenario realizada por el Centro de Políticas Públicas, donde señaló que surge la existencia de un sorpresivo conflicto en la relación entre chilenos y extranjeros. Según el académico, este factor radica en la drástica variación de la percepción de un conflicto entre grupos, desde su primera medición en 2017.

En primer lugar, se presenta el conflicto chilenos-migrantes como uno de los más importantes para la sociedad, solo detrás del conflicto chilenos-mapuche y entre gobierno y oposición. Sin embargo, se muestra una discrepancia entre la opinión pública versus la élite nacional, donde esta última mantiene una percepción menos crítica sobre los niveles de conflicto en torno a la migración.

Otra de las conclusiones es sobre la percepción de los efectos económicos que traería la migración, lo cual según los resultados no ha cambiado. Existe la percepción, sobre todo en los grupos socioeconómicos bajos y medios, de cierto nivel de competencia, sobre todo en el área laboral. Sin embargo, son niveles que se han sido constantes en el tiempo.

Por otra parte, la pandemia se presenta como el punto de origen del aumento de la conflictividad entre ambos grupos. Lo cual radica, según el académico, en el aumento de la percepción sobre la existencia de una relación entre el aumento de inmigrantes y el nivel de delincuencia en el país. A lo que se suma la sensación de inseguridad y desconfianza hacia el grupo.

Por último, se presentó por primera vez un análisis que aborda la medida en que tanto chilenos como extranjeros se sienten discriminados. Según los resultados existe evidencia que respalda la sensación de las personas migrantes en nuestro país de ser discriminados en diferentes circunstancias. Sin embargo, la encuesta también establece que se mantiene una situación positiva de la población hacia los migrantes con su situación legal. Donde se muestra, que, por ejemplo, un 70% de los encuestados cree que los inmigrantes con su situación legal al día deberían tener los mismos derechos que los chilenos para acceder a beneficios de salud, educación y vivienda.

En el panel de conversación, Patricia Roa, destacó cómo la inclusión laboral da pie a una inclusión social que resulta fundamental para garantizar la paz en los países de acogida, “tener políticas que favorezcan la inclusión laboral de las personas migrantes no es solo importante para la contribución económica que los migrantes realizan, también generan una fuente de paz en la comunidad, una mayor cohesión y debería ayudar a disminuir los miedos legítimos que se expresan en la encuesta, tanto de chilenos como de migrantes”, señaló.

Por su parte, Bellolio, indicó que la migración por sí sola no puede ser descrita como buena o mala, sino que corresponde a un desafío, que depende de cómo se gestione, “Desde nuestros estudios para mejorar la cohesión entre nacional y extranjero hay que terminar con la impunidad. Tiene que haber mayor participación en la decisión a nivel comunal y regional sobre el tema de los flujos migratorios. Finalmente, mirar los casos donde hay privilegios a migrantes sobre nacionales, que generan problemas de cohesión relevantes y hay que hacerse cargo”.

Luis Thayer, director del Servicio Nacional de Migración, insistió en la importancia de abordar este fenómeno desde la eficiencia de las políticas públicas en la materia. En primer lugar, destacó que “tiene que haber una mirada de estado, aquí hay aprendizajes que son acumulables en el tiempo, o sea la política migratoria de un gobierno u otro gobierno, o de sectores políticos, me parece que es la ruta perfecta al fracaso de la política migratoria”. En segundo lugar, “la fortaleza institucional, se necesitan normas eficaces en términos de su implementación”. Por otra parte, que en los territorios que se han visto más desbordados por la presencia de personas extranjeras es necesario priorizar la presencia del Estado: “aquí la contención y el apoyo a los gobiernos locales y regionales desde el ejecutivo es central, y hay un último aspecto que me parece clave que tiene que ver con la colaboración de los países de la región, es fundamental poder contar con la colaboración de los países de origen de los migrantes y de los países vecinos”.

Los expertos coincidieron en la importancia del desarrollo de una política pública de migración para enfrentar este fenómeno, enfatizando en la arista delictual. Roberto Méndez enfatizó sobre la importancia de separar la actividad delictual asociado a la migración, del fenómeno migratorio que corresponde a un fenómeno demográfico. “La migración es diferente a la delincuencia, los grupos que vienen a delinquir los migrantes que cometen delitos también, bueno ese es un problema de seguridad y es el Estado chileno que tiene que verlo a través de los mecanismos de seguridad. Me preocupa cuando se confunde una cosa con otra”.

Por su parte, Thayer recalcó que la labor principal del Servicio Nacional de Migraciones consiste en garantizar la regularidad de las personas y entregó los principales lineamientos de la política migratoria,” tenemos que avanzar en procesos de inclusión de las personas que residen en el país, tenemos que fortalecer la capacidad de gestión en la frontera para evitar el ingreso irregular y tenemos que ser más eficaces en la implementación de sanciones para aquellas personas que son efectivamente un peligro para la sociedad”.

Para finalizar, Patricia, cerró con la necesidad de mantener el debate democrático que permitirá encontrar soluciones ad hoc, “esta encuesta deberían animar a que en muchos otros espacios se debata y se fomenten acuerdos que representen lo que la sociedad chilena espera de una migración que beneficie no solo a las personas migrantes, sino que también a todos los que habitamos en este lindo país”.